Según explicó Guillard, el gobierno de George W. Bush solicitó en dos ocasiones, a principios de 2008 y en diciembre pasado, a Camberra que acogiera a presos de Guantánamo, y que ambas solicitudes han sido rechazadas.
Guillard indicó que la última petición fue considerada anoche y que se ha notificado al gobierno estadounidense que no se aceptarían “esas solicitudes de reubicación”.
“Las peticiones de reubicación fueron estudiadas caso por caso teniendo en cuenta las estrictas medidas de seguridad nacional de Australia y las leyes de inmigración”, y fueron rechazadas al no ajustarse a ellas, explicó Guillard.
La primera ministra en funciones añadió que similares peticiones en el futuro serán estudiadas siguiendo los mismos criterios.
El portavoz de la oposición y miembro del Partido Liberal George Brandis mostró su apoyo a la decisión del Gobierno.
En la base de Guantánamo continúan unos 255 presos.
Australia se incorporó, desde el principio, a la coalición internacional encabezada por Estados Unidos para expulsar a los talibanés del poder en Afganistán en 2001, y después formó también parte de la que invadió Irak.
En este sentido, el Reino Unido estaría dispuesto a recibir a presos de Guantánamo para ayudar al próximo presidente de EEUU, Barack Obama, a cerrar el centro de detención, según afirmaba hace unos días The Times.
El Gobierno apoya unas medidas destinadas a recolocar a los detenidos de Guantánamo, a pesar de negativas anteriores para ayudar a la Administración de George W. Bush.