El Gobierno vasco ha emplazado al PNV a que "confirme o desautorice" las manifestaciones del parlamentario jeltzale Iñigo Iturrate, en las que decía temer que el PSE use "la estructura del Gobierno" para su campaña electoral, y ha anunciado que, en caso contrario, estudiará si "pueden derivarse responsabilidades de algún tipo" y actuará "en consecuencia".

   En un comunicado, el Ejecutivo que dirige Patxi López se ha pronunciado de esta manera en relación a las "gravísimas" declaraciones efectuadas por Iturrate el pasado miércoles, tras el anuncio de la renuncia como consejero de Interior de Rodolfo Ares, "sugiriendo la posibilidad de que desde el Departamento de Interior se pueda manipular el próximo proceso electoral o gestionarlo con 'parcialidad' o 'ventajismo'".

   "Transcurridas más de 24 horas, y pese a una petición expresa en ese sentido, ni el señor Iturrate ni el partido al que pertenece han rectificado unas manifestaciones absolutamente injuriosas y faltas de cualquier fundamento", ha censurado.

   En este sentido, ha destacado que "nunca nadie ha puesto en cuestión a lo largo de la etapa democrática la limpieza de las elecciones celebradas en nuestro país", a pesar de "las circunstancias excepcionales" en que se han celebrado algunas de ellas, ni tampoco "nunca nadie ha dudado de la neutralidad e imparcialidad de las instituciones encargadas de gestionarlas".

   El Gobierno vasco ha asegurado que no puede "tolerar unas imputaciones tan ofensivas y gratuitas" como las efectuadas por Iturrate, ni aceptará que "acusaciones insidiosas de esta naturaleza, que afectan al núcleo del juego democrático, queden en el ambiente como simples lances de la precampaña electoral". 

   Por ello, ha emplazado "formalmente" al presidente del PNV, Iñigo Urkullu, a que "como máximo responsable" del partido "manifieste de forma pública si comparte las imputaciones de Iñigo Iturrate" o que, "de no ser así, que le rectifique y desautorice".
CONFRONTACIÓN DE PROYECTOS

   En caso contrario, ha anunciado que estudiará si, de las palabras del dirigente nacionalista, "pueden derivarse responsabilidades de algún tipo" y actuará "en consecuencia".

   Finalmente, ha insistido en que "la pugna ideológica debe librarse en el terreno de la confrontación de proyectos y en la crítica constructiva". "Desde luego, no va a ser con descalificaciones gratuitas ni con insultos ni con acusaciones tremendistas como consigamos prestigiar entre la ciudadanía el imprescindible oficio de la política", ha concluido.