La Fiscalía de la Audiencia Nacional considera que el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, no reveló información confidencial en la rueda de prensa ofrecida en julio tras la detención de cuatro miembros del GRAPO por su relación con el secuestro del industrial Publio Cordón y que se limitó, por contra, a informar a la opinión pública sobre el operativo.
El Ministerio Público pide así, en un informe remitido al juez de la Audiencia Nacional Javier Gómez Bermúdez el archivo de la causa abierta sobre las declaraciones del titular de Interior, al considerar que no incurrió en la comisión de un delito de relevación de secretos.
"No resulta acreditado que se hayan revelado o divulgado indebidamente piezas, documentos, o diligencias sumariales", asegura la fiscal Ana Noé que agrega que el ministro se limitó en la rueda de prensa "a informar a la opinión pública, con carácter general, de los resultados de la investigación".
El magistrado preguntó el pasado sábado en una providencia a la Fiscalía si procedía trasladar al Tribunal Supremo la investigación respecto a si Fernández pudo ofrecer en la citada comparecencia pública datos protegidos por el secreto de sumario relativos a la causa.
Tras visionar las grabaciones remitidas por tres televisiones de la rueda de prensa, el juez entendía que no es competente para investigar los posibles delitos del ministro, en el caso de que los hubiera.
La providencia también dejaba abiertas otras opciones para la Fiscalía, tales como archivar el caso por no ser los hechos constitutivos de delito, la asunción de la investigación por parte de los juzgados ordinarios de Madrid o practicar más diligencias antes de adoptar una decisión.
El escrito de la Fiscalía agrega, además, que Gómez Bermúdez no sería en ningún caso competente para investigar la posible comisión del delito atribuido indiciariamente a Fernández ya que "una infracción penal de esta naturaleza no encaja dentro de las competencias de la Audiencia Nacional".
Gómez Bermúdez también había requerido el pasado miércoles al Director General de la Guardia Civil, Arsenio Fernández de Mesa, y al General Jefe del Servicio de Información de la Guardia Civil, Faustino Álvarez Sola, que le comunicaran en un plazo de cinco días "quien o quienes le dieron información verbal o escrita del resultado de las investigaciones y a quien se la transmitió". No obstante dejó sin efecto, el citado requerimiento al considerar que "no se estima necesario por ahora".
El juez abrió investigación por la comisión de un presunto delito de revelación de secretos tras las detenciones ante la filtración de datos incluidos en una comisión rogatoria remitida desde Francia y que contenía las pesquisas llevadas a cabo en el país galo sobre el secuestro de Cordón. El magistrado entendía que este hecho repercutía negativamente en la cooperación judicial internacional y podría también perjudicar a la causa abierta en relación con el secuestro del empresario zaragozano.
RUEDA DE PRENSA
Durante la rueda de prensa sobre el secuestro, Jorge Fernández Díaz, explicó que el industrial zaragozano murió a los "15 o 16 días" de haber sido secuestrado por la banda terrorista GRAPO tras sufrir un accidente en un intento de huir.
El ministro dió en la comparecencia "por definitivamente esclarecido" el secuestro del cometido hace 17 años, a la espera de la aparición del cuerpo. Explico también que en la segunda planta de la vivienda donde permaneció recluído el industrial había un "armario-zulo cerrado con una cadena" en la que estuvo secuestrado.
Agregó que en este espacio se localizaron marcas con "palotes" que indicaban un plazo de dos semanas. Así, dijo que Cordón escribió '1SE' con siete palotes tachados y luego '2SE' con otros siete.
