El primer secretario del PSC, Pere Navarro, ha expresado el "afecto y respeto" de los socialistas catalanes hacia el expresidente de la Generalitat entre 2003 y 2006, Pasqual Maragall, quien este domingo asistió al acto central de ERC en su campaña de las elecciones europeas.
Tras asistir este lunes a un desayuno informativo del cabeza de lista del PSC al Parlamento Europeo, Javi López, y en respuesta a los periodistas, Navarro ha dicho que expresa "como siempre el afecto y respecto por la figura de Maragall".
Un mensaje muy similar ha expresado Javi López: "Respeto mucho la figura personal y política de Pasqual Maragall", que no ha querido hacer más valoraciones al respecto.
El exprimer secretario del PSC y eurodiputado Raimon Obiols ha dicho que él coincide con las tesis de López: "Como dicen los castellanos, 'Cada alma en su armario'. Todo el mundo tiene sus criterios personales sobre lo que hace y lo que no hace".
Por otra parte, y en alusión al debate soberanista, Javi López ha dicho: "Yo quiero mucho a mi tierra y a mi país, pero somos 7 millones dentro de 500".
Tras hacer una apelación al diálogo, ha detectado que el modelo territorial debe debatirse con el resto del Estado, y no en las instituciones europeas, cuyo papel debe ser el de abogar por el consenso y la negociación.
POR UNA NUEVA MAYORÍA
Ha destacado que es fundamental que de estas elecciones salga una nueva mayoría en el Parlamento Europeo liderada por los socialdemócratas, y ha destacado que pese a que han tenido que hacer recortes, hay diferencias entre la estrategia contra la crisis que han seguido los gobiernos conservadores y los progresistas.
En este sentido, ha vuelto a defender la figura del primer ministro francés, Manuel Valls, que anunció un fuerte programa de recortes y que participará este miércoles en el acto central de campaña del PSC en Barcelona, y según López, este político galo no ha rebajado las políticas sociales, educativas y culturales, lo que demuestra que hay alternativa a las políticas de la derecha.
Para explicar la situación actual de Europa, ha recurrido a un símil: la ha definido como un edificio donde hay un sistema de calefacción central, y en los pisos de arriba hace fresco, por lo que es necesario encender la estufa, mientras que en los de abajo hay "un incendio terrible".
"El problema es que sólo hay un mando a distancia y una calefacción central, y durante estos años, se ha encendido la calefacción mientras que los pisos de abajo están cayendo", ha ejemplificado el candidato.