Debido al mal tiempo de las últimas horas, los inmigrantes están pasando frío ya que toda la ropa y mantas están mojadas
La situación de los 234 inmigrantes del barco de la ONG alemana Lifeline empeora debido al mal tiempo de las últimas horas, tras cinco días esperando que les asignen un puerto a 30 millas de Malta, informó a EFE el fundador de la organización Axel Steier.
Steir señaló que los cooperantes de a bordo han informado de que uno de los cuatro niños rescatados, de unos dos años y medio, viaja sin ningún familiar, "es una situación que te rompe el corazón", subrayó.
El fundador de la ONG señaló que durante la noche se produjo una evacuación de emergencia debido a que uno de los inmigrantes necesitaba urgente atención médica, se pidió a las autoridades de Malta un helicóptero pero "después de mucho tiempo enviaron una barca para trasladarlo".
Debido al mal tiempo de las últimas horas, los inmigrantes están pasando frío ya que toda la ropa y mantas están mojadas, añadió Steier.
Los inmigrantes, que fueron rescatados el pasado 21 de junio, se encuentran todos en cubierta, pues la embarcación tiene una capacidad para cerca 50 personas y no hay espacio para todos en el interior.
Además de la falta de comida también empieza a escasear el carburante, explicaron desde la ONG.
"Los líderes europeos no se pueden ni imaginar lo que esta pasando. Tendrían que coger todos un barco y venir a dar un vistazo", añadió Steier, que calificó "de vergüenza" el abandono por parte de Europa.
El fundador ya explicó que tras el rechazo de Italia y de Malta se ha pedido ayuda a España y a Francia sin obtener ninguna respuesta.
El vicepresidente del Gobierno de Italia, Luigi Di Maio, dijo ayer que si finalmente se asigna un puerto a la ONG alemana Lifeline en el país, después requisarán el barco.
El capitán de la embarcación, con bandera holandesa, Claus-Peter Reisch aseveró en declaraciones al canal Sky Italia que visitó el Lifeline que no se les puede acusar de ser traficantes, que son todos voluntarios y que no cobran dinero por ello y solo quieren salvar vidas.
Italia permitió anoche el desembarco de los 113 inmigrantes del mercante danés "Alexander Maersk" en el puerto siciliano de Pozzallo (sur) y que habían sido rescatados por la Lifeline el pasado 22 de junio y trasladados a este buque.