El independentismo ha clamado ante las prisiones catalanas por la "unidad" del soberanismo y la "libertad" de sus dirigentes encarcelados, mientras que el presidente catalán, Quim Torra, PDeCAT y ERC han advertido de que no apoyarán los presupuestos del Gobierno de Pedro Sánchez
La conmemoración del primer año del encarcelamiento de los miembros del anterior Govern y los líderes independentistas ha coincidido con la divulgación de los escritos de acusación de la Fiscalía y la Abogacía General del Estado.
La Fiscalía ha acusado a los líderes del "procés" de un delito de rebelión y pide 25 años de prisión para el exvicepresidente catalán Oriol Junqueras, 16 años para cada uno de los cinco exconsellers presos y 17 para los líderes de las entidades independentistas Jordi Sànchez (expresidente de la ANC) y Jordi Cuixart (Òmnium) y para la expresidenta del Parlament Carme Forcadell.
En cambio, la Abogacía del Estado, dependiente del Gobierno, pide 12 años de cárcel para Junqueras, 11 años y medio para cinco exconsellers, 10 años para Forcadell y 8 años para los 'Jordis', todos acusados de un delito de sedición, en un gesto en el que se desmarca de la Fiscalía.
En tres actos multitudinarios ante las cárceles de Lledoners (Barcelona), Puig de les Basses (Girona) y Mas d'Enric (Tarragona), manifestantes independentistas han exigido la "libertad de los presos políticos" y han clamado por la "unidad" del soberanismo.
El epicentro de las protestas ha sido nuevamente la cárcel de Lledoners, donde se hallan encarcelados Oriol Junqueras, Quim Forn, Jordi Turull, Josep Rull, Raül Romeva, Jordi Sànchez y Jordi Cuixart, que esta tarde han recibido la visita del presidente de la Generalitat y otros representantes del Govern y de los partidos.
En su discurso posterior en el acto, Torra ha calificado de "intolerable e inaceptable" lo sucedido y ha llamado a la movilización "permanente" antes del juicio, además de lanzar un contundente mensaje al presidente del Gobierno.
"Hace un mes pedí al presidente Sánchez que en el plazo de 30 días planteara una oferta al pueblo catalán, un referéndum acordado y vinculante. Días después envié una carta a autoridades internacionales pidiendo que Sánchez aceptara una mediación. Hoy tenemos la respuesta del Estado: más de 200 años de cárcel. Pues presidente Sánchez, nosotros, el pueblo de Cataluña, le retiramos el apoyo y no votaremos los presupuestos", ha anunciado Torra.
También el presidente del PDeCAT, David Bonvehí, ha afirmado desde Lledoners que, tras conocerse los escritos de acusación, su 'no' a los Presupuestos Generales del Estado es "aún más evidente".
En esa línea, el vicepresidente catalán y adjunto a la presidencia de ERC, Pere Aragonès, ha llamado desde Mas d'Enric a seguir la "movilización" en Europa y ha dicho que el Gobierno de Sánchez no ha cambiado la "línea represiva" del ejecutivo de Mariano Rajoy, por lo que con él "no se puede colaborar". "A ningún gesto ni movimiento del Estado, imposible gesto o movimiento por nuestra parte", había dicho también en declaraciones al mediodía.
Los dirigentes encarcelados también se han posicionado a través de cartas leídas en los actos ante las cárceles, como ha sido el caso de Oriol Junqueras, que ha afirmado estar preparado para afrontar un juicio que "no será justo" ya que "esto no va de leyes" sino que solo quiere ser "un castigo".
El exconseller Joaquim Forn, por su parte, ha afirmado en su carta que la cárcel ha hecho a los dirigentes independentistas ser "más fuertes" e irán al juicio "con la cara bien alta", mientras que el expresidente Carles Puigdemont ha dicho a los presos, en otra misiva, que su "sacrificio no será en vano", sino que será "el precio" de la "dignidad colectiva" del pueblo catalán.
Entre las consignas más coreadas en las manifestaciones se han escuchado las de "abrid las cárceles", así como "libertad presos políticos", "fuera la justicia española", "no estáis solos", "paro de país" o "unidad".
Un último cántico que ha reinvindicado el exdiputado Lluis Llach, quien en su intervención ha indicado a los actuales diputados independentistas que "no se puede admitir nada más que la unidad estratégica", y ha dicho que "está llegando el momento" de "llenar las calles para vaciar las cárceles".
