La Comisión de Competencia Desdeal de la FOE, a tenor de la información recibida desde sus Asociaciones locales y sectoriales como BARECA y CECA-Comercio Huelva, ha lanzado la voz de alarma ante el incremento de la venta ambulante ilegal de productos, acrecentada durante el verano. Los empresarios se quejan de la pasividad de los Ayuntamientos ante una problemática que está mermando la economía de negocios que sí cumplen religiosamente con sus obligaciones y que se sienten 'abandonados' por parte de las Administraciones.
Este ha sido el principal problema detectado en los municipios más importantes de la provincia, especialmente en los costeros, donde la venta ambulante sin cobertura legal se ha disparado en las zonas más transitadas, poblándolas de puestos callejeros que se han establecido, con el amparo municipal, en las mismas puertas de empresas locales que ven atónitas la situación. La falta de personal policial en municipios turísticos, con una población que se multiplica considerablemente durante los meses de verano, agrava aún más el problema.
La queja de los empresarios, especialmente comerciantes y hosteleros, ha sido unánime y la Comisión de Competencia Desleal de la FOE la ha hecho suya, acordando pedir colaboración y coordinación entre las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y las policías locales de cada municipio, para evitar y perseguir en su caso, con los instrumentos que les otorga la ley a cada uno, la venta ambulante ilegal de perecederos y la oferta de productos falsificados.
La indiferencia municipal unida a la complicidad ciudadana ha permitido el incremento desproporcionado de estos vendedores ilegales que, según los empresarios, “están más protegidos que nosotros mismos, sintiéndonos del todo indiscriminados, lo que está llevando a una situación del todo insostenible que se repite desgraciadamente cada año”.
Los afectados sostienen tener que es muy duro tener que “aguantar que delante de sus propios escaparates se estén vendiendo falsificaciones de bolsos, gafas, calzado, etc. sin que nadie haga nada” y añaden que hay zonas en algunas poblaciones, caso de La Antilla, Punta Umbría, etc, donde en algunos tramos de sus calles peatonales resulta complicado incluso andar debido a la proliferación de vendedores que exponen sus artículos en grandes mantas extendidas en el suelo.