La Sección de Homicidios, Secuestros y Extorsiones de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil ha conformado un equipo de investigación para analizar nuevamente los hechos del doble crimen de Almonte (Huelva) en el que perdieron la vida una niña de 8 años y su padre en abril de 2013.

La medida se toma después de que el pasado mes de enero la titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción 1 de la Palma del Condado decidiera reabrir la causa una vez que la absolución del único acusado por estos hechos, Francisco Medina, había sido ratificada por el Tribunal Supremo.

La jueza libró oficio a la UCO para poner en su conocimiento la apertura de la pieza separada para continuar con la investigación y solicitarle que las llevaran a cabo.

Ahora, en un escrito remitido al juzgado en respuesta ese oficio, al que ha tenido acceso Efe, el comandante jefe del Grupo de Delitos contra las personas de la UCO. informa de la conformación de ese equipo de investigación que analizará de nuevo los hechos, "así como los registros técnicos recabados durante las actividades de la investigación realizadas hasta la fecha".

Dicho esto, precisa a la jueza que se le dará debida cuenta de "cualquier nuevo dato relevante para la investigación, así como de las conclusiones extraídas" y le informa del nombramiento de un oficial de enlace a efectos de aclaraciones o consultas sobre el estado de las actuaciones.

Hay que recordar que la investigación policial a raíz de estos hechos se prolongó por más de un año hasta que la Guardia Civil detuvo a Francisco Medina, por entonces pareja de la madre y esposa de los asesinados, al considerarlo autor de los hechos.

Esta persona proclamó su inocencia desde un principio y después de más de tres años en prisión llegó el juicio en el que fue declarado no culpable; decisión que después ha sido ratificada en todas las instancias judiciales a las que la acusación particular la ha recurrido.