El Museo que Jerez establecerá en honor de La Faraona que naciese en la calle Sol deberá esperar hasta inicios del próximo 2023 para que sea una realidad, según se desprende de las últimas declaraciones de la alcaldesa, Mamen Sánchez, realizadas la pasada semana. Parece que el acondicionamiento de la Nave del Aceite ya está, o está a punto de estarlo, listo pero según la regidora quedan "puntaditas" por darle a un proyecto en el que, lógicamente, se va de la mano de Lolita y Rosario para ofrecerle continente y contenido e, incluso, se están buscando patrocinios. Es de confiar que las fechas se mantengan en el tiempo, que entiendo que así será, porque hace ya muchos años que Lola Flores debería haber tenido su museo en la ciudad que le vio nacer, y eso no es culpa de este Gobierno Municipal, y porque no quiero siquiera pensar que la inauguración se vaya alargando en el tiempo, como está ocurriendo con el museo de Rocío, "La Más Grande", en su pueblo de cuna.
No obstante son circunstancias totalmente diferentes porque la sintonía del Ayuntamiento con la familia de una de las mejores embajadoras que ha tenido Jerez son distintas absolutamente a las que se han producido en el vecino municipio chipionero y de ahí esa certeza de que ese museo abrirá sus puerta en tiempo y en forma para irle dando ese cambio de cara a la zona de Intramuros e, igualmente, para ir expandiendo la oferta turística que nuestra población necesita, en aras de conseguir la permanencia de los que la visitan para ir a una bodega,a la Escuela de Arte Ecuestre o para hacer enoturismo.
Y ojalá y ese Museo a aquella que ni cantaba, ni bailaba pero que nadie se la podía perder sea la continuación de otros más a figuras señeras como, por ejemplo, a ese monstruo que, afortunadamente, está entre nosotros como Manuel Alejandro o ese gran museo del flamenco que debe estar en la Ciudad del mismo nombre, que también está en marcha, o, incluso, ese museo de la Semana Santa que está sobre la mesa o iniciativas privadas que están ahí y a las que, tal vez, haya que dotarla de contenido público para que tanta belleza y sobre todo tanta tradición tome fuerza en aras de ese Jerez que debe taponar sus carencias industriales con un turismo que debe ser fuente de vida y de economía.
Por todo ello, el Museo de Lola Flores tiene que hacerse realidad en el centenario del nacimiento de la genial artista, por lo que su inauguración debe ser el comienzo de un año dedicado por entero a ella, a Lola Flores, Lola de...Jerez.
