No saben exactamente cuándo se producirá la subrogación de sus puestos de trabajo porque les han trasladado que el proceso se va a retrasar, pero en la plantilla de la gasolinera de titularidad municipal de La Marquesa reconocen que respiran “mucho más tranquilos” una vez que desde el Ayuntamiento de Jerez les hayan comunicado que su puesto de trabajo no peligra después de que otra empresa, en este caso Cepsa, se haya hecho con la concesión administrativa por 15 años de la gasolinera de La Marquesa. Lo que sí les consta es que, de momento, seguirán algún tiempo más prestando sus servicios para Galp, la concesionaria saliente y que ha presentado alegaciones al proceso administrativo.
Los plazos iniciales preveían, sin embargo, que esta semana la multinacional entregase las llaves de la estación de servicio tras concluir el plazo de presentación de alegaciones, un trámite que se demorara todavía algún tiempo. Mientras tanto, los nueve empleados que la semana pasada pidieron ayuda y mostraron su preocupación ante la incertidumbre de su futuro, seguirán trabajando con normalidad en las instalaciones municipales todavía gestionadas por Galp hasta que la nueva adjudicataria, que prevé hacer una serie de obras de mejoras, se haga cargo. El pasado jueves era la propia delegada de Economía, Laura Álvarez, la que despejaba cualquier duda y enviaba un mensaje de tranquilidad a la plantilla a la pregunta planteada por el PP de qué sería de estos trabajadores con la nueva adjudicación.
Además de acusar a la concesionaria saliente de tener interés en “enredar la situación”. “Este Gobierno ha sacado en tiempo y forma una concesión administrativa que caducó. Teníamos un canon de un millón y vamos a cobrar 4 millones y medio. Vamos a multiplicar por tres los ingresos y estas personas van a poder seguir trabajando”.