Se trata de una acción de emergencia para 2023 ante la difícil situación de escasez de agua para regadío y para consumo humano en la zona
La comarca malagueña de la Axarquía recibirá el año que viene un total de 31 hectómetros cúbicos adicionales de agua, destinadas tanto al consumo humano como al regadío, gracias a las obras de emergencia puestas en marcha para paliar la situación de sequía.
En concreto, serán 21 hectómetros cúbicos de aguas regeneradas para los regantes de la comarca y 10 hectómetros para el abastecimiento de la población garantizados con las obras ya finalizadas del Bombeo de la Rosaleda y el primer tramo de la "Autovía del Agua" (6 hectómetros) y los pozos del río Chíllar (4 hectómetros).
La consejera de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural, Carmen Crespo, ha colocado este viernes la primera piedra de las obras de emergencia de la conexión del tratamiento terciario de la Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) de Rincón de la Victoria con los regadíos del Sector 8 del Plan Guaro.
Esta actuación supone una inversión de 15,3 millones de euros y prevé la instalación de unos diez kilómetros de conducciones para aportar recursos adicionales a los agricultores de Rincón de la Victoria y Vélez-Málaga.
En concreto, esta iniciativa sumará a la zona 3,1 hectómetros cúbicos de aguas regeneradas adicionales que completarán los hectómetros logrados con los terciarios ya concluidos de Torrox y Vélez-Málaga, con lo que se consiguen en total 12 hectómetros cúbicos adicionales para los regantes.
Antes de que finalice este año concluirán las obras de tratamiento de terciarios en Algarrobo, que aportarán un hectómetro cúbico más de aguas regeneradas, y comenzará también el proyecto previsto en el Peñón del Cuervo, que ofrecerá a los agricultores 9 hectómetros cúbicos de aguas regeneradas.
Las obras de conexión de los tratamientos terciarios de la EDAR de Rincón de la Victoria con los regadíos del Plan Guaro están incluidas entre las medidas de los Decretos de Sequía aprobados por la Junta, que en total conllevan movilizar 141 millones de euros.
Crespo ha anunciado que ha pedido "una reunión urgente" con el secretario de Estado de Medio Ambiente para, entre otras cuestiones, reclamar la desalinizadora prevista para la Axarquía, que considera "fundamental para garantizar el futuro", por lo que "hay que empezar a diseñarla cuanto antes".
Ha lamentado que los Presupuestos Generales del Estado de 2023 no incluyan inversión ni para esta actuación ni para la ampliación de la desalinizadora de Marbella.
Por ello, ha asegurado que seguirá "trabajando y dialogando con el Ministerio de Transición Ecológica para que sean una realidad este tipo de actuaciones que, en este momento de sequía, son prioritarias para el presente y el futuro”.