Mientras algunos turistas pasean con mascarilla por el Aeropuerto de Málaga, los responsables de seguridad están "desprovistos" de medios de higiene para desempeñar su trabajo durante la crisis del coronavirus.
Es la situación que ha denunciado el presidente del Comité de Empresa de ICTS Hispania, la compañía de vigilantes de seguridad del aeropuerto. Según Antonio Manuel Pérez García, la empresa no ha facilitado a sus empleados (340 vigilantes en esta época del año) medios de higiene para desempeñar bien su labor durante esta crisis sanitaria, como son mascarillas, guantes y gel desinfectante. “Hemos sido los propios trabajadores quienes hemos tenido que comprar todo esto de nuestro bolsillo porque nos dicen que este material está llegando, pero todavía no lo tenemos”, explica en declaraciones a Viva Málaga.
Además, denuncia que fueron ellos mismos quienes solicitaron a la empresa información, y no al contrario. “Los compañeros, desde el comité de seguridad y salud, entran todos los días en la página del Ministerio del Interior para ver qué ocurre. La empresa ha empezado a informarnos hace tres o cuatro días a cada puesto, pero es la misma que buscamos nosotros”, detalla.
"Aena no desinfecta"
Unido a la falta de medios de higiene que, según Pérez se extiende a la mayoría de trabajadores del aeropuerto, se une que Aena, la empresa pública que gestiona los aeropuertos españoles, “no desinfecta las zonas por las que circulan los pasajeros. No se ve nada de seguridad y más cuando recibimos a personas de todo el mundo, tenemos que hablar con ellas, cachearlas...”, lamenta.
Esta falta de medios ha llevado a que dos trabajadores de la empresa se encuentren en cuarentena y la espera de realizarse las pruebas para conocer si dan positivo en coronavirus o no, según Pérez. “Son dos trabajadores que estuvieron en contacto directo con la exministra y vicepresidenta segunda del Congreso, Ana Pastor. Trasladaron su situación al 112 y se mantienen a la espera”, informa el vigilante de seguridad.
En cuanto a las tiendas y restauración, durante la tarde del domingo ya estaban cerrados la mayoría de restaurantes, aunque los pocos que se mantenían abiertos presentaban largas colas. Sin embargo, el Duty Free sí estaba cerrado, tal y como comentaron otros trabajadores del aeopuerto consultados por este periódico.
“El que quiera pasar un día normal en su vida, se puede venir al aeropuerto porque la Policía no le va a decir nada. Esto es un cortijo donde mandan unos señores que no están haciendo absolutamente nada porque por la cantidad de gente que hay, esto parece una jornada normal del mes de agosto”, concluye Pérez, poniendo una nota de humor.