La Policía Nacional ha desarticulado un grupo criminal asentado en las localidades malagueñas de Marbella y Estepona dedicado a introducir hachís en España a través de embarcaciones náuticas para su posterior distribución a otros puntos.
En esta operación contra el narcotráfico han sido detenidas once personas --nueve hombres y dos mujeres de nacionalidad británica, marroquí y española-- por su presunta participación en un delito de tráfico de drogas y otro de pertenencia a grupo criminal.
Los agentes se han incautado de casi siete toneladas hachís, un kilo de cocaína, 5,4 gramos de MDMA, 222.720 euros en efectivo, 995 libras esterlinas, 900 dirhamns marroquíes así como un arma de fuego con cartuchos, nueve vehículos, 25 teléfonos móviles, un dispositivo GPS, un inhibidor de frecuencia, una máquina cuenta billetes, tres balanzas de precisión y dos máquinas de envasado al vacío entre otros efectos.
Según ha informado la Policía Nacional en un comunicado, la investigación comenzó el pasado mes de marzo. Los agentes tuvieron conocimiento de la existencia de grupo de personas, de nacionalidad marroquí y española, que conformaban una organización criminal dedicada a introducir sustancias estupefacientes en España mediante embarcaciones náuticas.
A finales de mayo, los investigadores detectaron a uno de los investigados cuando circulaba a bordo de un vehículo por Estepona. Ante la sospecha que pudiera transportar droga, se inició su seguimiento hasta que el conductor detectó la presencia policial y se dio a la fuga. Tras una persecución, en la que el huido embistió a varios vehículos policiales, se logró su detención, comprobando que, efectivamente, portaba varios fardos de hachís.
Al día siguiente, otro de los investigados era localizado en el núcleo marbellí de San Pedro de Alcántara. Los agentes interceptaron la furgoneta en la que circulaba y localizaron 35 fardos de hachís, arrestando a su conductor.
LA VIVIENDA DEL LÍDER, GUARDERÍA DE LA DROGA
En el transcurso de las gestiones para identificar a los componentes del grupo criminal, los policías localizaron a un grupo de personas originarias de Reino Unido e Irlanda y comprobaron que se trataba del cabecilla y otros cuatro miembros más de la organización.
Los policías constataron su implicación en la actividad delictiva fueron detenidos y registrada el domicilio del líder situado en San Pedro de Alcántara. Allí fueron incautados 150 fardos de hachís, un kilo de cocaína, 208.830 euros y una pistola con munición que se ocultaba en un armario con doble fondo al que se accedía mediante un sofisticado sistema hidráulico.
Hace pocos días, los agentes llevaron a cabo la última fase de la operación y arrestaron a otros cuatro miembros de la organización. Se practicaron tres registros en los domicilios de los investigados donde se intervino un total de 10.400 euros y se incautaron 312 kilos de hachís, entre otros efectos.
Fruto del dispositivo policial llevado a cabo en las dos fases reseñadas se ha conseguido desarticular una organización criminal dedicada al tráfico de drogas y detener a once miembros de la red por su presunta implicación en un delito de tráfico de drogas y pertenencia a grupo criminal. Durante los operativos se practicaron un total de seis registros --cuatro domicilios y dos trasteros-- utilizados por los arrestados.