La secretaria general del PP y presidenta del partido en Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal, denunció ayer que “algunas actitudes de personas muy destacadas del Gobierno de España “están poniendo en riesgo a la democracia”.
En rueda de prensa celebrada ayer en Toledo, donde presidió la Comisión Regional de Agricultura y Agua de su partido en Castilla-La Mancha, se detuvo en “los ataques constantes a la democracia” y puso de manifiesto “lo peligrosas que son algunas actitudes de miembros de PSOE y del Gobierno de España”.
A su juicio, “algunas actitudes de personas muy destacadas del Gobierno están poniendo en riesgo a la democracia” y pidió al presidente José Luis Rodríguez Zapatero que “en vez de callarse” y “alentar” con su actuación ese “tipo de actitudes” debería obrar “en defensa de la democracia, de la división de poderes, de la igualdad de todos los españoles y de las instituciones españolas”.
“No se puede estar actuando como lo está haciendo el PSOE”, le ha recriminado al presidente del Gobierno, “no se puede estar intentando todos los días reabrir las viejas heridas”.
La dirigente popular recalcó que en lugar de eso debería dar “más soluciones a los trabajadores, empresarios, autónomos, familias españolas y agua”.
“Eso es lo que debería hacer Zapatero y no lo que está haciendo el Gobierno de España, alentando otra vez la división, las fracturas y sin dar soluciones a los auténticos problemas de los ciudadanos”, concluyó.
El vicesecretario general del PSOE, José Blanco, tachó de “repugnante” la crítica de la dirigente del PP María Dolores de Cospedal a las manifestaciones de apoyo al juez Baltasar Garzón y deploró el comportamiento del Partido Popular, al que ha acusado de jalear a los falangistas.
Blanco, quien participó en Fuenlabrada en un acto con socialistas madrileños, reprochó las palabras de De Cospedal. “Claro que no corre riesgo la democracia. A la democracia no la pone en riesgo ni el Partido Popular”, rechazó tajante Blanco, quien avisó de que “lo único que corre riesgo es el PP”, que, con su comportamiento, “da oxígeno jaleando todos los días a los falangistas”.
Abundó en esta idea al apuntar que “es sorprendente ver al PP cómo ha jaleado estos días a los falangistas” y, a la vez, denuncia que los demás están atacando la independencia judicial.
“Nosotros siempre respetamos la independencia de los jueces y la libertad de expresión de los ciudadanos, da igual por quién sean convocados”, aclaró Blanco, para considerar a continuación que al líder del PP, Mariano Rajoy, “sólo le parecen actos democráticos aquellas manifestaciones en las que participan él y su gente”.
Una conducta que, al entender de José Blanco, denota “la hipocresía, el cinismo y la caradura” de Rajoy, que parece “haber olvidado” que no hace mucho tiempo salió a la calle para protestar por el acortamiento del periodo de cárcel del etarra José Ignacio de Juana Chaos.
Para Blanco, el PP defiende la independencia judicial “persiguiendo a los jueces y acusando a la Policía de falsificar pruebas cuando el zapato aprieta”, con el único objetivo de “buscar la impunidad”.
Durante su alocución, el también ministro de Fomento ha opinado que a Rajoy “le marcan permanentemente el camino” otras personas, porque él nunca habla “ni alto ni claro”, y ha ironizado al señalar que “quien gobierna el PP es Mariano De Cospedal”.
Jordi Sevilla ve “irresponsable” usar la confrontación como arma electoral
El ex ministro de Administraciones Públicas Jordi Sevilla advierte a los dos grandes partidos de lo irresponsable y peligroso que es utilizar la “confrontación social” como estrategia electoral para “desanimar” a los votantes del adversario.
Sevilla hace esta reflexión en un artículo titulado ‘No, a la confrontación social como método’ que publica en su blog de internet, a propósito de las concentraciones que se celebraron el sábado en toda España para denunciar la impunidad del franquismo y apoyar el juez Baltasar Garzón.
El ex ministro socialista asegura que no acudió a la manifestación ‘Contra la impunidad del Franquismo’ no porque no esté a favor de ella, sino porque se niega “a formar parte de la sistemática confrontación social permanente en la que nos quieren meter”.
“Todo parece que tiene que ser a favor, o en contra. De Garzón, del pacto educativo, de las medidas de Zurbano, del Estatuto de Castilla-La Mancha, del Tribunal Constitucional, de la reforma laboral, la energía nuclear...”, todo bajo la misma premisa: “o con unos o con otros, sin matices, sin términos medios, sin medias tintas”, señala.