Los ciudadanos que se encuentran acampados en la madrileña Puerta del Sol no han hecho análisis de los comicios y han considerado “injusto” que se les responsabilice del aumento del porcentaje de los votos nulos en las elecciones municipales, un 1,69 por ciento, cota que nunca antes se había alcanzado.
En la plaza madrileña a los indignados ya les está haciendo mella el cansancio acumulado y ahora se centran en la elaboración de propuestas a partir de las sugerencias que los ciudadanos siguen depositando en los buzones distribuidos por el campamento.
De hecho, el próximo objetivo del movimiento “Toma la plaza” es implicar a la ciudadanía y para ello tienen previsto celebrar reuniones en los diferentes barrios de Madrid el próximo sábado.
Y a pesar de la actividad, ya se nota que la Puerta del Sol empieza a estar más despoblada, una circunstancia que los portavoces del movimiento achacan a que es lunes y la gente tiene que trabajar.
“Esto es solo el inicio, no creemos que esté decayendo, sino todo lo contrario”, ha asegurado uno de los portavoces, quien ha añadido que en principio tienen previsto permanecer acampados hasta el próximo domingo.
Precisamente para que el 15-M continúe y no se apague, en la asamblea general que se celebró ayer por la mañana acordaron redefinir la finalidad de la acampada ante el peligro de “desunión” que puede acarrear el gran número de propuestas que se están planteando, cada vez más concretas y más alejadas del objetivo inicial: la indignación ante la corrupción de la clase política.
Asimismo, los “indignados” de Madrid quieren dar ejemplo de sostenibilidad y han dado luz verde a la instalación de placas solares que suministrarán la energía que se consuma en las tiendas de campaña y carpas.
Ante la posibilidad de que en estos días los acampados sean obligados a abandonar el campamento por la fuerza, también han aprobado un protocolo de desalojo, que incluye instrucciones sobre resistencia activa no violenta.
En Barcelona, donde también ha disminuido el número de acampados en Plaza de Catalunya, el cabeza de lista de CiU en Barcelona, Xavier Trías, ha ofrecido su apoyo al hasta ahora alcalde de la ciudad, Jordi Hereu para que, antes de que se consume el cambio en la alcaldía, se disuelva la acampada.
Los “indignados” saben que tienen por delante “mucho trabajo para que la cosa no decaiga y la policía no encuentre excusas para echarles”, según ha comentado Oriol, de la comisión de extensión de la acampada.
Y como en Madrid y Barcelona, en el resto de ciudades españolas el movimiento trata de mantener vivas las protestas y se resisten a abandonar las plazas.
Así, los malagueños han decidido mantener su protesta en la Plaza de Constitución de forma indefinida, al menos hasta el próximo domingo, cuando los reyes presidirán los actos del Día de las Fuerzas Armadas.
El movimiento continúa sumando apoyos, como el del actor Imanol Arias, quien ha opinado que esta iniciativa ha servido para “detectar en los medios y en la calle dónde está la extrema derecha en España, esa a la que le molesta “el olor del cuerpo humano” y que prefiere el aroma de los bancos suizos.