El dirigente norcoreano, Kim Jong Un, ha visitado la estación de esquí de Masik, la primera con la que contará el país y considerada un proyecto personal del propio mandatario, que parece continuar con su agenda días después de que el régimen ejecutase a uno de sus tíos por traidor y corrupto.
La visita de Kim al complejo de esquí ha sido anunciada por la agencia de noticias oficial, KCNA. Según la agencia surcoreana Yonhap, las obras están prácticamente concluidas, por lo que su inauguración sería inminente.
Kim continúa con sus viajes apenas unos días después de que el régimen confirmase la ejecución de su tío político Jang Song Thaek, considera el una suerte de mentor del joven líder norcoreano desde que asumió el poder hace dos años.
La ejecución de Jang se produjo después de que el Gobierno le apartase de todos sus cargos, incluido el de vicepresidente de la poderosa Comisión de Defensa Nacional, así como del órgano de dirección del Partido de los Trabajadores, por participar en un supuesto complot opositor.