La Agrupación de Hermandades y Cofradías de Ronda se desplazó este martes a la sede de la Asociación Senda-Proyecto Hombre para dar a conocer el proyecto de caridad que está desarrollando esta corporación.
El presidente de la Agrupación, Carlos Ramírez, acompañado de la presidenta de Senda-Proyecto Hombre, Pepa Becerra, y de la secretaria de la entidad, Luci Pastor, además de representantes de las distintas hermandades de la ciudad, explicó que la Agrupación ya ha llevado a cabo la acción caritativa que tenía proyectada y aprobada el año pasado.
De este modo, la acción caritativa fue dividida en dos partes, una primera destinada al colegio-hogar de La Inmaculada, dotándolo de dos televisores de última generación para los niños y adolecentes que allí residen, y una segunda dirigida a las instalaciones de la Asociación Senda-Proyecto Hombre, dotándolas del mobiliario necesario para que sus trabajadores puedan ofrecer una mejor asistencia y servicio a todos los usuarios.
Carlos Ramírez mostró el agradecimiento de todas las hermandades a Proyecto Hombre “por abrirnos hoy sus puertas para mostrarnos la labor de acompañamiento, rehabilitación y reinserción social que desempeñan. Esperamos y deseamos de corazón que la ayuda les sirva para seguir con ese gran trabajo de prevención y sensibilización hacia todas las personas que han solicitado su ayuda y la solicitan a día de hoy”.
En nombre de Senda-Proyecto Hombre, Pepa Becerra, expresó el agradecimiento de la Asociación a todas a las hermandades “porque la ayuda llegó en un momento absolutamente necesario para nosotros. Realmente la providencia nos cuida”.
Así, explicó que gracias a la contribución de las hermandades, cuentan con un mostrador, un nuevo mueble para la sala de visitas y equipamiento para la sala médica necesario para su utilización por parte del médico y del equipo terapéutico.
En este sentido, apuntó que la Asociación ha ganado mucho en profesionalidad, ya que “la administración nos exige tener psicólogo sanitario, trabajadora social, un médico, terapeutas, integrador social, educadores, y todo eso ha requerido cosas materiales que son necesarias”. “Trabajamos cosas o aspectos inmateriales, como son la persona a nivel cognitivo y afectivo, que es mucho y arduo, pero necesitamos una estructura y un soporte de muebles que hemos comprado gracias a la ayuda que nos prestó la Agrupación”.
