El encadenamiento este pasado martes de miembros de diferentes colectivos sociales y políticos, entre ellos el Sindicato Andaluz de Trabajadores (SAT) e IU, en el antiguo colegio El Castillo, ha provocado reacciones entre los responsables del Ayuntamiento. Así, la alcaldesa, Mari Paz Fernández, ha criticado que la intención de los manifestantes sea sólo "hacer ruido y aparecer en los medios de comunicación".
En cuanto a la petición de que el inmueble albergue un comedor social realizada por los participantes en la protesta, ha asegurado que no se trata de un servicio necesario en estos momentos, ya que el Consistorio ya puso en funcionamiento hace unos meses una cocina social que atiende cada mes a 130 personas. "No tenemos más peticiones para participar en este programa e, incluso, hay meses que nos sobran plazas", ha afirmado.
Fernández también ha recordado que este edificio, que lleva sin uso 10 años, es propiedad de la Fundación Moctezuma, que "realiza importantes labores sociales en Ronda", entre ellas la concesión de becas cada año a estudiantes rondeños con dificultades para costearse sus estudios.
También se ha referido a este asunto la primera teniente de alcalde de la ciudad, Isabel Barriga (PA), quien ha indicado que el Ayuntamiento tiene un escaso margen de actuación al respecto. "No es una propiedad municipal, y no podemos expropiarlo de un día para otro, porque sería un procedimiento largo", ha manifestado.
Además, la edil rondeña ha criticado la participación de uno de los ediles de IU, Álvaro Carreño, en esta acción reivindicativa, al tener su formación responsabilidades de gobierno en la Junta de Andalucía.
"Que se encadenen al sillón de la consejera de Fomento y Vivienda, Elena Cortés, por las 365 VPO que hay paralizadas en Ronda", ha declarado. Mientras tanto, los manifestantes han vuelto este miércoles al antiguo colegio, tras permanecer este pasado martes hasta las 21.00 horas.