La historia de los cines de San Fernando, fundamentada en la consultas en archivos históricos y sobre todo en los testimonios y recuerdos de muchos isleños, que guardaban en su memoria hasta la película que sirvió de estreno en muchos cines, se contiene en el libro.
La última iniciativa de El Güichi de Carlos. Un portal web que veía la luz en junio de 2005 con su presentación en el Museo Histórico Municipal y que nació gracias a la inquietud de Carlos Rodríguez López, con el afán de difundir la Isla de otros tiempos, ha sido la edición de un libro, que bajo el título de El Cinematógrafo en La Isla, recoge la historia de los cines de San Fernando.
La web fue creciendo a tal ritmo, que incluso se ha convertido en uno de los programas más seguidos de Radio La Isla y Onda Luz Televisión.
Hace un año, el Güichi de Carlos presentaba el libro Güichis, Utramarinos y otras historias cotidianas de La Isla y otro libro sobre Los Patios de La Isla. La edición de este libro se agotó en horas, y va ya camino de su cuarta edición. En aquella ocasión, lo recaudado se entregó al comedor social de El Pan Nuestro. El libro sobre los cines, también tiene carácter benéfico, ya que su venta será destinada a la Asociación de Reyes Magos, para la campaña Ningún Niño sin Juguetes, y a Upace.
El Cinematógrafo en La Isla, que cuenta con la participación de 175 colaboraciones entre artículos, empresas y fotógrafos.
La presentación del libro
El presidente de la Real Academia de San Romualdo y gestor cultural, José Carlos Fernández Moreno fue el encargado de presentar el libro, destacando que “tiene todos los ingredientes para su éxito”.
Fernández Moreno hizo un recorrido por el libro, destacando la repercusión de los cines en San Fernando y no olvidando algunos detalles como los cortes de luz que se producían en el mejor momento de la proyección, por los problemas en suministro que tenía la ciudad de San Fernando.
José Carlos Fernández inició su intervención hablando del origen de los cines y de su llegada a San Fernando, resaltando cómo los autores del libro han conseguido localizar más de 60 salas o pantallas de proyección, incluyendo cines de verano, de invierno y otros de barrios.
El primer cine registrado en San Fernando data de 1902 y nació de la mano de Francisco Bans y Mañez, que solicita su montaje en la Plaza de la Iglesia. A partir de ahí José Carlos valoró todo lo que aportó el cine a la sociedad isleña y cómo el cinemat invitó a soñar y a alcanzar cotas más altas.
Durante 45 minutos, el presidente de la Real Academia de San Romualdo supo mantener al público entregado y lo hizo cuando se centró en cines como el Madariaga, el cine de verano más grande de Andalucía, con capacidad para 6.000 personas.
La portada del libro, elaborado por Juan Romero Burgo, refleja precisamente una estampa del antiguo Gran Cinema Madariaga con el ambiente propio de la puerta. Al acto asistieron antiguos trabajadores de los cines como Francisco Cumbreras ‘El Mudo’, que actuaba como portero en el cine Madariaga y en el Almirante, entre otros, además de José Bujet, entre otros profesionales del sector.
El público quedó maravillado cuando José Carlos Fernández le dio la sorpresa al descubrir sobre el escenario del auditorio Lázaro de Dou, una antigua butaca del desaparecido cine Madariaga, lo que trajo a la memoria de muchos lo que fue aquel cine de verano ubicado en el barrio del Cristo y junto al campo de fútbol, Marqués de Varela, también desaparecido.
Sorpresas y emociones en la presentación
El cine Salón, el cine Puchero, el cine Chamorro, el cine Marqués de Varela, el Avenida, el Florida, el Carraca, el Alameda, el Almirante, el Madariaga, el Gran Cinema... La presentación del libro hizo un recorrido por todos los cines, pero especialmente resultó una sorpresa para el público asistente, el momento en el que José Carlos Fernández descubrió una antigua butaca del desaparecido cine Madariaga.
Ahí no quedó la cosa, ya que el presentador mostró otras piezas de su museo particular, como los carteles que identificaban al cine y que se situaba sobre la cartelera que se repartía por las calles isleñas, o incluso la plantilla con la que se rotulaban las cartelera del Gran Cinema Madariaga.
El público asistente aplaudió y se mostró sorprendido de la aportación del presentador y aprovechó el final del acto para echarse fotos con la butaca del antiguo cine Madariaga.
“¿Quién nos iba a decir a nosotros que íbamos a tener que a ir a un cine de la calle Arenal, donde se celebraban los duelos de honor?”, se cuestionó Fernández.