Hoy jueves al mediodía se ha inaugurado la cocina solidaria que ha promovido Cáritas en el edificio de la antigua Cofradía de Pescadores en Bonanza. Un proyecto de promoción, en colaboración con la propia entidad pesquera, la Hermandad del Carmen de Bonanza y el Ayuntamiento de Sanlúcar de Barrameda, que busca satisfacer las necesidades alimenticias de las familias sanluqueñas que formen parte de esta iniciativa, a la vez que reciben formación y se promueven lazos solidarios entre ellas mediante el estímulo de sus capacidades para cocinar, compartir y convivir.
En este acto han estado presentes el alcalde, Víctor Mora, José Mazuelos, obispo de Asidonia-Jerez, Francisco Domouso, director de Cáritas Diocesana, Salvador Vidal, hermano mayor de la hermandad de Nuestra Señora del Carmen de Bonanza, así como José Antonio Díaz, patrón mayor de la cofradía de pescadores de Sanlúcar de Barrameda. También han acudido párrocos de la localidad, representantes de hermandades y numerosas empresas, entidades y voluntarios que han colaborado en la puesta en marcha de este proyecto.
Esta cocina social proyecto se aleja del modelo asistencialista de comedor social, y apuesta por la dignificación de la persona, fomentando su autonomía y haciéndole partícipe del proceso de elaboración y manipulación de los alimentos, como lo explicó Francisco Domouso. La cocina cuenta, por tanto con todas las garantías para la correcta manipulación y elaboración de los alimentos.
El alcalde ha dado las gracias a todos los participantes en esta iniciativa y ha destacado su carácter formativo, similar a los planes de empleo municipales, lejos de las simples ayudas asistenciales. “Es importante que a las personas se les ayude, pero también que se les forme, como en este proyecto”, apuntó Mora, quien insistió en la mano tendida a Cáritas para seguir trabajando.
José Mazuelos, por su parte, se mostró satisfecho por la puesta en marcha de esta cocina a la que se refirió como un logro de todos. “En la búsqueda del bien común y en la dignificación de las personas nos juntamos creyentes y no creyentes y debemos ir todos de la mano”.
