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Andalucía

Cazar libros en vez de Pokémon

Un joven sevillano crea en Facebook el grupo 'Cazadores de libros Sevilla' que invita a esconder libros por la ciudad para que otros puedan cazarlos y leerlos

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  • Libros liberados y cazados -
  • El objetivo es el de fomentar la lectura con el intercambio de libros y cultura
  • Los miembros del grupo esconden libros por Sevilla, dejan un mensaje para dar a conocer la iniciativa y retratan la hazaña para Facebook
  • En tan sólo una semana superan los 2.800 miembros y piensan dar el salto con una web y una app

Además de Pokémon, en las calles de la capital hispalense también se pueden “cazar” libros desde hace una semana. No, no es una nueva aplicación o juego de otra multinacional  ávida de aumentar sus ingresos, sino la puesta en marcha, con mucha imaginación y ganas, de una de esas tantas ideas que pasan por delante de nuestras pantallas del ordenador o nuestras cabezas cada día.

Álvaro Martel, joven sevillano que trabaja como administrativo en el Hospital Virgen del Rocío, vio de casualidad el vídeo de una chica de Bruselas que escondía un libro en su ciudad para que otros lo encontraran y pudieran disfrutar del ejemplar. Y ahí empezó todo. Álvaro rumió la idea durante la cena y se lanzó a crear un grupo privado en la red social Facebook, que bajo el nombre de ‘Cazadores de libros Sevilla’, arrancó la noche del jueves pasado con menos de 200 miembros (todos amigos o del círculo de Álvaro) y que en menos de una semana ya cuenta con más de 2.800 participantes. El grupo es cerrado y sólo se puede acceder por invitación o porque alguien lo solicite después de haberse topado en las calles de Sevilla con algunos de los “libros liberados” por otro miembro del grupo.

¿En qué consiste la iniciativa que para su precursor comenzó como un juego? “La idea es la de fomentar la lectura, el intercambio de libros y cultura y de paso hacer moverse a la gente”, explica Álvaro, amante también de los deportes.

Según cuenta el artífice de la idea (quiere dejar claro que el germen de todo fue el vídeo de la chica de Bruselas y que él lo inició sin mayores pretensiones) el mecanismo es muy sencillo. Se trata de dejar algún libro que se quiera “liberar” de nuestras casas y esconderlo en alguna localización de Sevilla.  Se hace una foto del libro y del lugar a modo de pistas y se suben al grupo de Facebook ‘Cazadores de libros Sevilla’. Quien desee leerse ese libro, se desplaza hasta ese lugar y una vez lo tiene en su poder, deja otro libro en otro lugar de Sevilla y realiza la misma operación, lo fotografía y lo sube al grupo. El “cazador” que haya terminado de leer el libro que cazó, deberá volver a “liberarlo” y colgar la foto, para que otra persona lo encuentre.

Proyectos a corto y largo plazo
La idea ha gustado tanto, que el grupo ya tiene un buen batallón de “cazadores de libros” y las ideas y los miembros van en aumento cada día.

La página de Facebook recibe decenas de solicitudes y Álvaro dice sentirse entre “desbordado y emocionado” por la acogida. “Todos tenemos libros ya disfrutados en casa que pueden ser joyas para otros, de ahí la expresión de liberarlos”, señala Álvaro, que recuerda que el primer libro que liberó fue el de La casa de los Espíritus y su primer libro cazado fue El nuevo Kamasutra ilustrado.

El artífice de esta “locura literaria” hace también de administrador del grupo y escribe consejos para su buen funcionamiento, ayudado por Vicky Bascarán y Ana Turueño, las otras dos administradoras. Entre estos consejos están envolver los libros liberados en papel film o meterlos en bolsas de plástico para que no se estropeen; esconder los libros en sitios que luego se marquen en la página Facebook (hay libros que se han perdido porque se los ha encontrado alguien ajeno); que siempre haya libros liberados y en circulación; volver a liberar los libros cazados e invitar al grupo a todas las personas “amantes de los libros” y a las que se crea que puede gustar la iniciativa.

Y para todos aquellos que se encuentren un libro y no sean del grupo también hay mensaje. Cada libro liberado debe contener una nota o inscripción en la primera página que explique el mecanismo y dónde encontrar al grupo. “Se han perdido libros del grupo, pero puede servir para que se enganche a la lectura gente ajena”, indica.

Para corto plazo, Álvaro ya tiene en mente otras ideas. Como macro liberaciones de libros infantiles en una fecha concertada y en algún punto concreto como los parques de la ciudad. “Amigos me han contado cómo han disfrutado cuando han salido con sus hijos a cazar libros y cuánto les ha gustado a sus hijos leerse los libros encontrados”. Además, Cazadores de libros Sevilla también ha creado un evento para liberar y cazar libros aprovechando la inercia cultural de  la Noche en Blanco, que se celebrará el próximo 7 de octubre.

Y para el medio y largo plazo, debido a la gran difusión que está teniendo la idea, Álvaro, Vicky y Ana han pensado en crear una aplicación informática (app) para marcar los puntos de la ciudad dónde están los libros y ayudar así a los usuarios y profesionalizar el proyecto a través de una web, además de dar el salto a otras redes sociales como Twitter e Instagram.

Así que ya saben, si se encuentran con un libro “liberado” por alguien del grupo, se acaba de convertir en un nuevo “cazador” de libros de Sevilla.

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