Los Mossos d'Esquadra han desarticulado en colaboración con la Policía Nacional a una organización criminal que robaba dinero de cajeros automáticos después de reventarlos con explosivos, y han detenido a 23 personas.
La primera fase de la investigación, realizada íntegramente por los Mossos, se inició en abril de 2016 y finalizó el 3 de agosto, periodo en el que detuvieron a 14 personas, la mayoría de origen chileno y que se dedicaban a realizar estafas, robos con fuerza en domicilios y robos con fuerza en cajeros automáticos con la utilización de gases explosivos, han informado los Mossos este miércoles en un comunicado.
Las estafas se realizaron en Cataluña, Valencia, Vitoria y Pamplona y consistían en sustraer documentos identificativos y tarjetas bancarias para hacerse pasar por el titular y sacar dinero en efectivo en la ventanilla de un banco, en lo que participaban personas de origen español a cambio de dinero.
Además se les atribuye un robo cometido durante la noche de Sant Joan en el interior de un centro comercial de una población del Vallès Occidental (Barcelona), donde hicieron explotar dos cajeros automáticos y cortaron varias vías de acceso para poder huir colocando colchones ardiendo y cruzando vehículos sustraídos.
También se les atribuyen robos con fuerza en viviendas de varias localidades catalanas y les encontraron joyas, relojes y aparatos electrónicos y dinero en efectivo cubierto de tinta, un mecanismo de seguridad propio de los cajeros cuando el dinero es retirado a la fuerza.
SEGUNDA FASE
En una segunda fase de la investigación se constituyó un equipo conjunto entre Mossos y diferentes unidades de la Policía Nacional, puesto que los sospechosos habían empezado también a operar en la Comunidad de Madrid.
Esta investigación comenzó en junio y acabó el 23 de enero con siete entradas y registros en domicilios de Cataluña y nueve detenidos, la mayoría de origen chileno a los que se les atribuyen 15 robos con fuerza en domicilios y cajeros, nuevamente con explosivos.
La mayoría de los robos con fuerza fueron cometidos en varios municipios de las comarcas de Selva, Gironès (Girona), el Maresme y el Vallès Oriental (Barcelona).
También se les atribuyen dos nuevos robos en cajeros automáticos usando explosivos, uno de ellos en Riudellots de la Selva (Girona), de donde se llevaron 7.300 euros, y otro en grado de tentativa en Badalona (Barcelona).
Algunos de los detenidos acumulan antecedentes en países de la Unión Europea --en algún caso incluso en cuatro países diferentes--, principalmente en Francia, Alemania, Bélgica, Holanda, Suecia, Italia y Reino Unido.
Los 14 detenidos de la primera fase de la investigación pasaron a disposición judicial el 5 de agosto de 2016 y el Juzgado de Instrucción 2 de Valls (Tarragona) ordenó el ingreso a prisión de siete de ellos.
Los detenidos de la segunda fase pasaron a disposición judicial el 25 de enero y el Juzgado de Instrucción 1 de Santa Coloma de Farners (Guirona) decretó el ingreso a prisión de tres de los integrantes.
La investigación continúa abierta para determinar si han participado en más robos y para localizar el resto de miembros de la organización, que han sido identificados y para los cuales se han emitido órdenes judiciales de busca y captura.
