La Guardia Civil ha detenido en Lanzarote a seis personas de una organización criminal que introdujo en esta isla canaria 470 kilos de cocaína valorados en 17 millones de euros en un velero procedente de Sudamérica.
Se trata de la llamada "operación Miami", informa hoy el instituto armado en una nota, que ha supuesto el desmantelamiento de esta banda de narcotraficantes liderada por un español de 29 años que responde a las siglas R.H.N. y que, al igual que el resto de detenidos, ha ingresado en prisión.
La droga incautada, que se iba a distribuir tanto en Canarias como en la Península, se trasladó al archipiélago en un velero que, en febrero, había adquirido el líder de la organización junto con una barca de fibra con dos motores de gran potencia.
Otro de los detenidos, un argentino de 54 años que responde a las siglas S.A.A.H., fue quien patroneó la embarcación desde Sudamérica después de que el velero recalara unos meses en el Caribe y embarcara luego la droga cerca de la costa de Venezuela.
Las investigaciones, explica la Guardia Civil, comenzaron en febrero de este año, cuando se detectó que una persona había comprado el velero y también la embarcación con los motores de gran cilindrada.
Los agentes relacionaron estas compras con uno de los españoles detenidos, residente en Lanzarote, y con el ciudadano argentino, que hizo saltar las alarmar porque es miembro de un importante cártel de la droga peruano.
El argentino contaba, según el relato de la Guardia Civil, con tres identidades falsificadas diferentes y una requisitoria en vigor por narcotráfico.
Dos meses después de adquirir el velero, en abril, el español y el argentino se embarcaron para cruzar el Atlántico rumbo a Sudamérica.
Mientras el velero estaba fuera de la isla, los agentes continuaron con la investigación y la vigilancia del cabecilla, que se había quedado en la isla, y detectaron que había más personas relacionadas con la organización.
Se trata de varias personas con escasos o nulos recursos económicos que realizaban en su nombre las gestiones o labores que él requería para la organizar la llegada del velero. De esta manera conseguía ocultar su identidad para que no se le relacionara con los delito.
De hecho, el jefe de la red había impuesto un complejo sistema numérico para encriptar las comunicaciones entre los miembros de la banda e impartirles órdenes.
Para hacer un seguimiento de los movimientos del velero en el Caribe, los investigadores pidieron ayuda a la Drugs Enforcement Administration (DEA) de Estados Unidos, al servicio de aduanas francés en el Caribe, a la Gendarmería Nacional argentina y a Europol.
Los agentes se encontraron con que la embarcación pasó una larga temporada en la zona caribeña de Antigua y Barbuda y transbordó luego la droga desde otra embarcación en las proximidades de la costa venezolana, concretamente en la madrugada del 6 de agosto.
Acto seguido, sus tripulantes pusieron rumbo de vuelta a las Islas Canarias y, en alta mar, traspasaron la droga desde el velero a la barca de fibra, que luego la trasladó a la costa de La Santa, en el municipio de Tinajo (Lanzarote).
Allí, agentes de la Guardia Civil del Puesto Principal de Costa Teguise detuvieron al ciudadano argentino que había patroneado el barco y a un ciudadano español. También intervinieron 20 bolsas de deporte que contenían 470 kilogramos de cocaína, valorada en 17 millones de euros en el mercado negro.
Posteriormente, el velero fue localizado y registrado en el muelle deportivo de Puerto de Calero, donde se hallaron numerosos indicios para continuar con la operación.
Basándose en todas sus investigaciones, la Guardia Civil realizó tres registros en domicilios de Lanzarote, donde se intervino documentación importante para la investigación y sofisticados medios electrónicos de comunicación y navegación.
Los detenidos en la operación, aparte del cabecilla español y del argentino, son D.A.A.A., español de 34 años y tripulante del velero; O.R.O., español de 32 años detenido en la embarcación que trasladaba la droga a la costa; L.M.L.M., español de 39 años detenido en Lanzarote, y C.D.M., español de 32 años detenido también en Lanzarote.
Estos arrestados facilitaban infraestructura a otra organización asentada en Sudamérica para el transporte de la droga desde allí al archipiélago canario.
La investigación ha sido dirigida por el juzgado de instrucción 2 de Arrecife (Lanzarote), que ha decretado prisión para todos los detenidos.