El español Jorge Lorenzo (Yamaha YZR M 1) llega líder al trazado de Mugello, escenario este fin de semana del Gran Premio de Italia de MotoGP, en el que es el último vencedor durante las últimas siete temporadas.
El líder del mundial y vigente campeón del mundo ha ganado cuatro de los cinco últimos grandes premios de Italia y fue segundo en las ediciones de 2009 y 2010, mientras que su actual compañero de equipo, el italiano Valentino Rossi, quien ostenta más victorias en el circuito de la región de la Toscana con siete desde 2002 hasta 2008, no se sube a lo más alto del podio desde esa última fecha.
El circuito de Mugello tiene fama de ser uno de los más técnicos y rápidos de todo el calendario del campeonato del mundo y si bien su hinchada es de las más ruidosas y fieles a los pilotos italianos, no parece que tenga estadísticamente en ellos a los principales candidatos a la victoria.
Desde 2008, con Valentino Rossi, ningún piloto transalpino ha podido ganar en Mugello, en donde sí lo hicieron el australiano Casey Stoner (2009) y los españoles Dani Pedrosa (Repsol Honda RC 213 V) en 2010, Marc Márquez (Repsol Honda RC 213 V), en 2014 y Jorge Lorenzo el resto de campañas (2011, 2012, 2013 y 2015).
Tanto Márquez como Lorenzo tendrán como principal objetivo la victoria, si bien quien parece tener más probabilidades, en tanto en cuanto no solucione sus problemas de tracción en aceleración con las Repsol Honda, es el vigente campeón del mundo, que de esa manera podría aumentar algo su exigua ventaja de cinco puntos respecto a un Marc Márquez que necesita sumar el máximo número de puntos para enmendar el error en forma de caída que sufrió en Le Mans (Francia).
Quien llegará con un semblante mucho más tranquilo es Dani Pedrosa, que ya ha firmado su renovación por la escuadra Repsol Honda para las dos próximas temporadas, apenas una jornada más tarde de que se confirmase "extra oficialmente" la llegada de Maverick Viñales a Yamaha.
Será en los prolegómenos del comienzo del Gran Premio de Italia cuando se formalice una noticia inusualmente difundida de una y mil maneras, el futuro de una de las más valiosas promesas de MotoGP, Maverick Viñales, quien ha llegado a oír de todo sobre su futuro, pero al final ha sucedido lo que era más lógico, su pase a Yamaha para ser compañero de equipo de Valentino Rossi.
Y si Viñales da el salto a Yamaha esa plaza ya no podía ser para Dani Pedrosa, quien se apresuró en renovar por Repsol Honda para evitar tentaciones de terceros.
Sólo queda por resolver su futuro Marc Márquez, pero a estas alturas ya nadie duda de que continuará en Honda, el fabricante que le convirtió en el doble campeón mundial de MotoGP más joven de la historia del motociclismo.
Las Ducati Desmosedici, merced a su impresionante velocidad punta y sus prestaciones en Mugello, un circuito en el que realizan la inmensa mayoría de sus entrenamientos de preparación, debieran ser protagonistas destacados del fin de semana toscano, aunque para ello los dos Andrea, tanto Dovizioso como Iannone, deberán intentar cometer los errores que les han lanzado a posiciones muy retrasadas de la clasificación provisional del mundial.
Tanto Iannone como Dovizioso, que ayer renovó su vinculación con Ducati donde tendrá como compañero de equipo a partir del próximo año a Jorge Lorenzo, han pisado en alguna ocasión el podio de Mugello, pero nunca en su peldaño más alto.
Gracias a su rendimiento regular durante la temporada, Héctor Barberá es el mejor piloto de Ducati en lo que va de temporada, octavo del campeonato, posición que seguramente querrá mantener en Mugello, aunque para ello se las tendrá que ver, además de que los dos pilotos de Ducati, también con los oficiales de Suzuki, Aleix Espargaró y Maverick Viñales.
No serán los únicos rivales de Barberá, a quien bien puede plantar cara Pol Espargaró y su Yamaha YZR M 1, que necesita resolver su futuro deportivo de la mejor manera posible.
Algo más atrás tienen que estar las dos Aprilia RS-GP oficiales, que si no falla la programación de sus ingenieros, con el italiano Romano Albesiano a la cabeza, debiera permitir al español Álvaro Bautista y el alemán Stefan Bradl contar con un motor nuevo más potente y ligero en Mugello.
"Tito" Rabat (Honda RC 213 V) falló en Le Mans y se fue por los suelos, pero el de Mugello es un circuito que le gusta mucho y en el que espera poder volver a puntuar.