La paz, ese estado social imprescindible para el desarrollo de los pueblos, palabra tantas veces vacía de contenido y meta casi siempre inalcanzable en este mundo inhumano de guerras, exterminios y luchas de opuestos en nombre de no sabe bien qué. La paz, ese ideal para el que es imprescindible la suma de virtudes. Y entre estas virtudes, la belleza femenina tiene algo que decir.
Con el objetivo de alzar la voz y sumar en la concienciación mundial para la consecución de una convivencia sana entre los pueblos, nace el certamen de belleza Miss Universo por la Paz y la Humanidad, que se celebrará en Chipre a partir del próximo 25 de noviembre, y en el que España estará representada por la modelo onubense Irene Olivares Mora.
Irene tiene 26 años, es de la localidad de Moguer y tiene lo que viene siendo un cuerpazo de vértigo refrendado por sus 1,89 metros de altura. “Queremos sumar para luchar contra las guerras, los conflictos sociales, y apoyar las ayudas humanitarias y la investigación sobre las enfermedades raras”, explica esta modelo onubense en la conversación que mantuvo con Viva Huelva. “El objetivo es dar un grito de paz al mundo”. Irene Olivares Mora es modelo internacional desde hace tres años, pero lleva desde que tiene 14 años formándose para abrirse hueco en el mundo de la moda. “Tuve claro desde pequeña que quería ser modelo”. Trabaja en pasarelas, fotografía, anuncios publicitarios, videoclips, y ahora afronta el reto de ser la única representante española en este certamen que se celebra este año por primera vez
Irene fue elegida en un casting online en el que se impuso al resto de candidatas y acabó siendo elegida por la directora del certamen. Junto a ella, en Chipre habrá mujeres representantes de unos 50 países.
Solidaridad
El certamen será un escaparate para el marketing pacifista, pero las modelos participantes competirán, más allá de poner su imagen al servicio de la paz, para hacerse con los premios económicos tras la semana de eventos con la moda como protagonista. Serán 50.000 dólares para la primera finalista y 25.000 para la segunda. Irene Olivares, si logra hacerse con uno de los dos premios, donará parte de la cantidad a ayudar a una familia de su pueblo con el fin de poder tratar a un niño de cinco años que padece Síndrome de Hurler, una enfermedad genética. “Las ganadoras podrán hacer lo que quieran con el dinero, pero yo tengo claro que ayudaría a esta familia”.
Con este gesto solidario, Irene va preparando la maleta para partir a tierras chipriotas, donde vestirá diseños del modista de Algeciras Rafael Levequer, y donde estará acompañada y peinada por el peluquero onubense Javier Flores.
El nombre de Huelva en nombre de la paz y abanderado por esta modelo moguereña que ya logró en 2010 el título de Miss Intercontinental en Barcelona, que tiene su vida totalmente asentada en el mundo de la moda y que pondrá su granito de arena por un mundo más humanitario porque, al fin y al cabo, nada hay más bello que la paz.
