El culebrón sobre el traslado temporal de la Dama de Elche a su ciudad para la celebración del 125 aniversario de su descubrimiento parece no tener fin. El caso se ha convertido en un continuo intercambio de declaraciones contrarias entre el Ministerio de cultura, dirigido por el socialista Miquel Iceta, y el alcalde socialista de la localidad, Carlos González.
El último capítulo se producía ayer cuando los técnicos del Ministerio insistían en la negativa a la petición de traslado del consistorio ilicitano. La decisión, dicen, se apoya en un nuevo estudio, basado en el análisis geológico realizado en 2006 y firmado en diciembre por técnicos del ministerio. Los técnicos aclaraban además que el nuevo grupo de trabajo creado para analizar el estado de la obra solo tiene un objetivo, conocer el estado de la Dama, no reevaluar su posible traslado.
Esta aclaración del ministerio se produce un día después de la reunión mantenida en Madrid por una delegación del ayuntamiento de Elche, encabezada por su alcalde, con el director general de Bellas Artes para conocer el estado de la pieza arqueológica, y tras la que Carlos González se mostraba optimista ante la posibilidad de una cesión.
Y tras conocer esta nueva negativa del ministerio, el edil, continúa en sus trece, y sigue confiando en una posible cesión.
La indecisión y el cruce de declaraciones han terminado ya por enfadar a la oposición que pide se aclare la situación.
El culebrón dura ya siete años, comenzó con gobierno popular, aunque este último capítulo se iniciaba el pasado 29 de enero cuando el consistorio recibía esa negativa del Gobierno a su solicitud de traslado temporal de la figura basándose en los exámenes realizados en 2006 en los que se señalaba que hay que evitar cambios de humedad o movimientos que podrían causarle daños irreversibles a la pieza. Un informe que no impidió, sin embargo, que la pieza viajara a la ciudad alicantina para la inauguración del museo arqueológico.